Durante una breve pausa del mediodía de hoy, Josep María Montaner presentó en el Auditorio de la Universidad de Palermo el libro "Arquitectura y Crítica en Latinoamérica", bien acompañado por un "ateo de la modernidad", nuestro amigo Claudio Caveri. Fruto de sus clases de posgrado, continuando el esquema general iniciado en "Arquitectura y Crítica" (Barcelona, 1999) y profundizando exclusivamente en los aportes latinoamericanos, el autor ordena cronológicamente y por regiones -Argentina, Brasil-Chile, México-Venezuela-Perú- el inicio del desarrollo de las teorías y los escritos críticos. Prosigue luego una segunda etapa de consolidación de esas teorías y una tercera dedicada a las expresiones de las nuevas generaciones.
Como largo anexo, selecciona 21 libros y les agrega una breve reseña. Entre ellos se encuentran textos de Marina Waisman, César Naselli, Edmundo O´Gorman, Lina Bo Bardi y Alberto T. Arai.
Una propuesta de ordenamiento que profundiza en las inter-relaciones tanto internas como de referencias europeas, logra plasmar un esquema importante para ubicarse en el pensamiento de los personajes, a veces desdibujado en su ritmo con largas seguidillas de datos, algunos prescindibles. El libro cierra con un párrafo que el mismo autor utilizó en el comienzo de la charla de hoy, en el cual con gesto amable y un tanto sobreactuado -que no quita el valor y la utilidad que este trabajo poseee y a su vez sostiene- remarca la importancia de la crítica de esta parte del globo en el contexto internacional de la modernidad.
"…Y es que estas anotaciones sobre la crítica de arquitectura en Latinoamérica nos han enseñado mucho más de lo que esperábamos de nuestra condición contemporánea. Porque ciertamente, este librito, que a algún eurocéntrico le podrá parecer menor, ha tenido la voluntad de ser un estudio sobre una aportación humana y cultural de tal peso y profundidad. La teoría y la crítica de arquitectura en Latinoamérica tienen tal calidad y generosidad en sus construcciones historiográficas, razonamientos críticos y planteamientos teóricos que la convierten hoy en una lección imprescindible, aportándonos claves para entender la condición posmoderna de la arquitectura. Nos toca ahora a los europeos aprender de los sabios caminos de superación de la modernidad abiertos por los críticos y arquitectos latinoamericanos…”
Josep María Montaner. Arquitectura y Crítica en Latinoamérica
Buenos Aires, 2011, Editorial Nobuko
La autora de la fotografía es María Sol Depetris, de la ciudad de Rosario. Gracias María Sol!!
Como adelanto de futuros artículos previstos, dedicados a la obra de Richard Neutra, les dejamos algunas delicias variadas que forman parte de su trabajo. Acompañan, junto a las imágenes, un extracto breve de sus obras completas, que señala una de las particularidades no siempre mencionadas de su obra.
Silver paint was the one constant in Neutra´s palette of materials. He specified it for hundreds of wood window stills, wood posts, roof gutters and galvanized metal fascia, whether the building was residential or commercial, 1935 or 1965. The office joke ran: “Mr Neutra, what is the best material to use for a steel house?” The question implies a mild deceit. If he was indeed making wood look like steel, Neutra was “dishonestly” aligning himself with the heroic new machine age of prefabrication and new technologies. Faux steel was better than no steel…
Barbara Mac Lamprecht. NEUTRA Complete Works. Köln, 2010, Taschen.Silver Paint, the Dutch and Japan
Seleccionados por el arq. Martín Lisnovsky
“…Looking at the history of a number of forms of engineering rationality from the Renaissance to the present, we can distinguish successive ages. For example, there seemed to be an age of classical – i.e. geometrical or Vitruvian, rationality. At the turn of the eighteenth and nineteenth century, this age was supplanted by another that could be described as the age of analytical rationality. Taking the case of French engineers, I shall deal now with this transition from geometrical or Vitruvian rationality to analytical rationality…
…Since I have emphasised the importance of the representations of nature, I shall begin by evoking the change in the perception of the physical world that took place in eighteenth century France. In that period, there was a general trend towards a more dynamic perception of nature. Whereas the Classic philosophers, scientists and engineers, used to consider nature as something organised according to the laws of order and proportion, as something essentially architectonic, eighteenth?century elites were increasingly impressed by the mobility of natural elements. While Bossuet wrote that God had created the world with order and proportion, Diderot and D'Holbach declared that change and movement were the main characteristics of nature. Mobility was seen as synonym of a vital activity, while immobility became synonymous with decay and death. Efficiency was no longer linked to an ideal arrangement of means ruled by proportions; it was seen as the expression of natural dynamism. Eighteenth century urbanism and territorial planning were clearly inspired by this conception…”
Antoine Picon "Towards a History of Technological Thought" (Article published in Robert Fox (éd.), Technological change. Methods and themes in the history of technology, London, Harwood Academic Publishers, 1996, pp. 37-49)
Seleccionado por el arq. Martín Lisnovsky
En el año 1979, la tradicional revista SUMMA -comandada entonces por Lala Mendez Mosquera- publicó un número que parecía inspirarse en las revistas de humor más renovadoras de los 70, la Chaupinela, la Satiricón y la Humor Registrado. Alcira Gonzalez Mallville, Roberto Rosenfeld y Jorge Alonso compilaron una gran cantidad de artículos y dibujos de artistas de la talla de Caloi, Fontanarrosa, Crist, Viuti, de arquitectos como Doberti y de plumas extranjeras como Sempé. Luego del reciente número de la revista del CPAU dedicado justamente al mismo tema, recordé que en algún lugar de mi biblioteca personal estaba y finalmente, lo encontré. Para celebrar entonces el cuarto aniversario, les dejo algunos trazos de aquella edición.
Editado por el arq. Martín Lisnovsky
